Descubre los mitos más comunes sobre el cultivo de suculentas. Aprende la verdad detrás de prácticas erróneas y descubre cómo cuidar correctamente estas hermosas plantas. ¡No te lo pierdas! #CultivoDeSuculentas #MitosYRealidades
A la hora de cultivar suculentas hay muchos mitos engañosos en la red, como; «necesitan mucho sol y muy poca agua, etc.». En este artículo te revelamos los mitos sobre el cultivo de suculentas. Te enseñamos la realidad detrás de algunos mitos sobre el cultivo de suculentas que te ayudarán a entenderlas mejor.
7 Mitos sobre el cultivo de Suculentas:
1. Necesitan mucho sol para desarrollarse
Es un gran mito que las suculentas necesitan pleno sol para crecer, y que no pueden prosperar en la sombra.
Al igual que no todas las plantas son iguales, no todas las suculentas lo son. Es cierto que muchas de las suculentas necesitan pleno sol para prosperar.
Pero muchas otras también pueden crecer en sombra parcial. Para ellas, la luz solar indirecta y varias horas de sol por la mañana son más que suficientes; por ejemplo, la Sansevieria (Espada de San Jorge), el Áloe vera y el Cactus cebra.
Consejo:
Dependiendo de los tipos de suculentas, cultívalas a pleno sol o en sombra parcial. Para cada una, deberás buscar información en internet o preguntar en el vivero local sobre la preferencia de sol necesaria.
2. Necesitan mucha agua
Este es otro mito, las suculentas son extremadamente tolerantes a la sequía y no piden agua durante meses, a lo que son nativas de zonas desérticas, guardan su reserva en sus hermosas hojas.
La frecuencia de riego depende de algunos factores, la ubicación de la plantación y el clima.
Si cultivas tu suculenta en una zona soleada y ventosa, tendrá sed con más frecuencia. Del mismo modo, tu planta necesitará agua con más frecuencia si crece en un clima muy cálido.
Pero en invierno, independientemente del lugar en que te encuentres, no hay que regarlas. Y en esta época pueden recibir mucho sol.
Consejo:
Asegúrate de que las macetas de tus suculentas tengan agujeros de drenaje; de lo contrario, el agua estancada provocará la putrefacción de las raíces.
Si las cultivas en tierra, recuerda regar muy poco, y cando lo hagas intenta no mojar sus hojas, riega a nivel del sustrato para evitar posibles enfermedades y plagas.
3. Deben cultivarse solo en arena
No hay que asumir que las suculentas deben cultivarse en arena pura sólo porque pueden prosperar en suelos pobres.
Para el cultivo de suculentas, lo mejor es una combinación de tierra y arena, concretamente la arena gruesa. Esta mejora la capacidad de drenaje de la mezcla para macetas y, al mismo tiempo, sigue siendo baja en nutrientes.
Por otro lado, un medio solo de arena puede no satisfacer las necesidades de nutrientes de las suculentas.
Consejo:
Para cultivar suculentas prosperas, combina 3 partes de tierra para macetas normal, 2 partes de arena gruesa y 1 parte de piedra pómez.
4. Las suculentas no son comestibles
Muchas suculentas son comestibles, ¡y comerlas puede ser muy saludable!
No todas, pero algunas suculentas son comestibles. Por ejemplo, muchas tribus tradicionales de África comen las raíces cocidas de Stapelia kwebensis. Por ejemplo, otras suculentas comestibles son el Nopal, el Áloe vera y la Pitahaya.
Consejo:
Asegúrate de buscar información antes de querer comer una suculenta, si no la conoces, considera que no es comestible. Puedes preguntar en el vivero de tu zona o buscar información en internet.
5. No se pueden cultivar suculentas en climas fríos
Las suculentas resistentes pueden crecer en las regiones frías del mundo y pueden sorprenderte.
Algunas suculentas resistentes pueden tolerar la temperatura de congelación. Por ejemplo, la Echeveria y el Sedum son suculentas resistentes al frío, que pueden tolerar temperaturas de 0 grados y bastante menos.
Consejo:
Protege tus suculentas de las heladas y la nieve cubriéndolas con nailon transparente, o llévalas a una maceta en el interior si la temperatura es inferior a los -10 grados C durante muchos días seguidos.
6. Ninguna suculenta es venenosa
Sentimos reventar tu burbuja, pero hay algunas suculentas venenosas, que pueden ser perjudiciales para tus mascotas o niños.
Algunas de ellas pueden ser la Euphorbia y el Árbol de Jade, que pueden dañar a tus mascotas o niños si las ingieren.
Mientras que algunas suculentas con espinas, como la corona de espinas, pueden herir a tus mascotas o niños.
Consejo:
Si tienes mascotas o niños en su casa, ten cuidado al elegir qué suculentas cultivar o ubícalas en un lugar inalcanzable.
7. Necesitan un suelo con muchos nutrientes
Las suculentas también pueden crecer bien en suelos menos fértiles, por lo que no es necesario abonarlas a menudo.
Las suculentas crecen bien en suelos menos nutritivos, ya que un exceso de nutrientes, especialmente de nitrógeno, hace que sean frágiles y puede hacer que sus raíces se quemen también.
No hay que abonarlas con mucha frecuencia y sólo hay que utilizar un abono líquido débil de proporción 8-8-8.
Consejo:
Las suculentas de exterior no necesitan mucho abono, pero si es necesario, puedes utilizar un abono equilibrado de liberación lenta durante la primavera.
Conclusión:
En resumen, cultivar suculentas no es tan complicado como parece. La clave está en desmitificar las creencias erróneas y entender las necesidades reales de estas plantas. Aunque algunas suculentas requieren mucho sol y otras pueden crecer en sombra parcial, todas necesitan una cantidad moderada de agua, una combinación adecuada de tierra y arena, y deben ser ubicadas en un lugar seguro fuera del alcance de mascotas y niños. Además, es importante recordar que algunas suculentas son comestibles y que el exceso de nutrientes puede dañarlas. Con estos consejos en mente, podrás cultivar suculentas saludables y hermosas en cualquier clima.
Preguntas frecuentes (FAQ):