Descubre cómo cuidar tus orquídeas en casa y mantenerlas radiantes. Aprende sobre el riego adecuado, las técnicas de rociado y la inmersión. Evita errores comunes y conoce las necesidades específicas de cada variedad. ¡Sigue leyendo y conviértete en un experto en el cuidado de estas hermosas plantas! Fuente: Ecología Verde.
Las orquídeas en su hábitat crecen y se desarrollan en plenitud sin demasiados inconvenientes, pero en el hogar requieren de muchísimos cuidados para mantenerlas vivas y radiantes.
Por lo general se las coloca en maceteros especiales que poseen agujeros de drenaje en la base y los laterales, e incluso a veces son de un material transparente que permite verificar la humedad y permite el paso de la luz para que la reciban las raíces.
El sustrato es por demás de ligero, es esencial para que permita que el agua pase rápidamente y no se estanque, ya que esto puede resultar fatal para la planta.
Pero bien, pasemos a hablar en detalle sobre…
El riego de las orquídeas
El riego de las orquídeas ha de hacerse por la mañana, de modo que la planta tenga todo el día para eliminar el excedente de humedad gracias al calor del sol.
Pero no está de más destacar que se las ha de rociar con poca agua varias veces por día para ayudarle a mantener un buen nivel de humedad en hojas y flores.
En cuanto a la frecuencia, depende mucho del clima, ya que si la temperatura es más baja el riego ha de espaciarse entre 10 a 15 días, mientras que en sitios más cálidos es necesario hacerlo 1 a 2 veces por semana ya que el calor hace que el agua se evapore más rápido.
Regado con chorro de agua en orquídeas
Los expertos recomiendan tomar la planta y ponerla bajo un chorro suave de agua, por lo general con una ducha para que el liquido no caiga solo en un sitio.
Se ha de mantener la orquídea bajo el agua por un minuto, comprobando que el excedente sale por los agujeros del contenedor sin estancarse.
Es de suma importancia comprobar que toda el agua fue drenada, ya que, si la tierra retiene un exceso de líquido, las raíces pueden pudrirse. En caso de que no se haya avenado bien, hay que cambiar el sustrato por uno más ligero, específico para orquídeas.
Regado por inmersión
El regado por inmersión es otra técnica muy empleada para el mantenimiento y cuidado de las orquídeas.
Para ello se coloca agua en un recipiente y se sumerge la planta hasta el límite del sustrato ¡no por completo! (recuerda que la tierra tiene que ser la específica para orquídeas y la maceta con agujeros en base y laterales).
El tiempo recomendado de inmersión es de 10 minutos, pero si se percibe que antes de este lapso las raíces se han tornado verdosas, es momento de retirar la planta del agua.
Comprobarás que al retirar la maceta el nivel de agua en el contenedor va a haber descendido, y que las raíces de la orquídea habrán pasado de blanco a verde.
Coloca la planta en otro contenedor mas grande y vacío para que se vaya desaguando el exceso y este no vuelva a las raíces. Si el recipiente no tiene desagüe, ve retirando el agua drenada hasta que notes que la planta expulsa más líquido.
Una vez culminado este proceso, vuelve a colocar tu orquídea en su sitio habitual.
Errores habituales en el riego de las orquídeas
Riego frecuente: ocasiona que las raíces se pudran fácilmente si hay demasiada humedad en el sustrato.
Riego nocturno: el riego a la noche hace que el agua se estanque fácilmente, en la tierra y en las hojas y flores de la planta, lo que genera además de pudrición de raíces, la aparición de hongos.
Desconocer el tipo de orquídea que se tiene y sus necesidades. No todas las orquídeas tienen los mismos requerimientos, hay que saber con qué variedad contamos para poder brindarle el mantenimiento adecuado.
Una buena forma de distinguir si la planta necesita agua es observando el color de las raíces, que se verán blancas cuando precisa de un riego, o los pseudobulbos en los que almacena líquido, los que se notarán muy finos si están deshidratados.
Fuente: ecología verde
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Conclusión
En conclusión, las orquídeas son plantas que requieren cuidados específicos para su correcto desarrollo en el hogar. El riego es uno de los aspectos más importantes a tener en cuenta, ya que un riego inadecuado puede llevar a la pudrición de las raíces o a la aparición de hongos. Es recomendable regar por la mañana y rociarlas con poca agua varias veces al día para mantener un nivel adecuado de humedad. También existen diferentes técnicas de riego, como el regado con chorro de agua o el regado por inmersión, cada una con sus propias indicaciones y precauciones. Además, es importante evitar los errores comunes en el riego de las orquídeas, como el riego frecuente o el riego nocturno. Conociendo las necesidades específicas de cada tipo de orquídea y brindándoles el cuidado adecuado, podremos disfrutar de estas hermosas plantas en todo su esplendor.
Preguntas frecuentes
1. ¿Cuál es la mejor forma de regar las orquídeas?
La mejor forma de regar las orquídeas es por la mañana, permitiendo que la planta elimine el exceso de humedad a lo largo del día. También es recomendable rociarlas con poca agua varias veces al día para mantener un buen nivel de humedad en hojas y flores.
2. ¿Con qué frecuencia debo regar las orquídeas?
La frecuencia de riego depende del clima. En temperaturas más bajas, se recomienda espaciar el riego entre 10 a 15 días. En sitios más cálidos, es necesario regarlas de 1 a 2 veces por semana debido a la evaporación del agua.
3. ¿Cuál es la técnica de regado con chorro de agua?
La técnica de regado con chorro de agua consiste en tomar la planta y ponerla bajo un chorro suave de agua, preferiblemente con una ducha, para que el agua no caiga solo en un sitio. Se debe mantener la orquídea bajo el agua por un minuto, verificando que el excedente salga por los agujeros del contenedor sin estancarse.
4. ¿Cuál es la técnica de regado por inmersión?
La técnica de regado por inmersión consiste en colocar agua en un recipiente y sumergir la planta hasta el límite del sustrato, asegurándose de que no esté completamente sumergida. Se recomienda un tiempo de inmersión de 10 minutos, pero si las raíces se vuelven verdosas antes de ese lapso, es necesario retirar la planta del agua.
5. ¿Cuáles son los errores habituales en el riego de las orquídeas?
Algunos errores habituales en el riego de las orquídeas incluyen el riego frecuente, que puede provocar pudrición de las raíces; el riego nocturno, que genera estancamiento del agua y la aparición de hongos; y desconocer el tipo de orquídea y sus necesidades específicas.
